Sal marina – ¿Cuántos tipos hay y qué tan saludables son?
Obviamente la sal es uno de los ingredientes más valioso en todo el mundo. Existen diferentes tipos de sal en donde se encuentra la sal marina. La sal es un mineral cristalino formado por dos elementos, el sodio (Na) y el cloro (Cl). Estos elementos son fundamentales para nuestro cuerpo.
Toda la sal sin procesar tiene una composición química muy parecida. Estas se componen principalmente de sodio y cloruro, así como de minerales adicionales como calcio, potasio y magnesio. Nuestros cuerpos dependen de estos minerales para trabajar juntos y apoyar el buen funcionamiento del cerebro, los músculos, los nervios y otras partes del cuerpo.
La sal se utiliza para diversos fines. Por supuesto que, el más común es dar sabor a los alimentos. Pero esta también es utilizada como conservante de alimentos. Esto es posible gracias a que las bacterias no pueden crecer en un ambiente rico en sal.
Sin embargo, tienes que tener ciertas precauciones cuando se trata de sal. Por supuesto debes tener cuidado en la cantidad de sal que consumes diariamente. Un alto consumo de sal marina o sal de mesa, puede provocar presión arterial alta y retención de agua.
Las áreas de producción de la sal de mar se les denominan salinas
Razones por las cuales la mayoría de los médicos recomiendan dietas bajas en sal a los pacientes cardíacos. Pero muy poco sodio puede ser tan dañino como demasiado. Es por eso la importancia de acudir a tu médico ante cualquier cambio que desees hacer en tu dieta. Muy atrás quedaron los días en que solo había un tipo de sal.
Hoy en día, las sales naturales, entre ellas la sal marina, son opciones que la mayoría sugieren como más nutricionales y saludables que la sal de mesa, incluyendo los sabores y las texturas. En los últimos años la sal marina ha desplazado mucho a la sal de mesa. Esto es debido en gran parte porque es menos procesada.
Por lo que la mayoría de las personas toman a lo más natural como más saludable. Pues bien, te indicaremos las diferencias entre ellas para que tú mismo compares y saques tus conclusiones. Por supuesto que te recordamos que si piensas hacer cualquier cambio en tu dieta, acudas primero a tu médico de cabecera, para descartar cualquier inconveniente y aclare tus dudas.
La sal de mesa
La sal de mesa es el tipo de sal más común y es la que siempre se encuentra en altas cantidades en prácticamente todas las comidas procesadas y rápidas del mundo. Esta sal de mesa está tan refinada que, todo lo bueno se elimina antes de que llegue a la boca. El proceso es el siguiente.
Una vez que la sal se extrae del suelo, se calienta a más o menos 649 grados C. o 1,200 grados F. Por lo que destruye la mayoría de las impurezas, pero también cualquier oligoelemento beneficioso, pero menos el sodio y el cloruro. Algunos minerales se vuelven a agregar, como es el caso del yodo, el cual se cree que mejora la salud y la función de la tiroides.
A principios de la década de 1920, se produjo una propagación epidémica de una afección física conocida como bocio. Es pocas palabras esta afección es un agrandamiento de la glándula tiroides o hipotiroidismo. Así que, para atacar este problema, los gobiernos federales de EE. UU. y Canadá, ordenaron la adición de yodo a la sal de mesa, lo cual funciono muy bien.
Esta sal es tan fina que obviamente puede agruparse o pegarse. Por lo que los fabricantes agregan agentes antiaglomerantes para que fluya con facilidad. La sal de mesa también puede poseer muchos otros aditivos, como fluoruro, compuestos blanqueadores para hacerla blanca y más.
Pero lo que se obtiene como producto final es una gran mezcla industrial de cloruro de sodio y productos químicos, sin otros ingredientes que contribuyan con la salud. Cabe mencionar que, los estudios cardiovasculares que se han realizado se ha utilizado la sal de mesa.
Sales naturales
Las sales naturales sin refinar, a diferencia de la sal de mesa altamente procesada, no se calientan, manipulan ni se alteran de ninguna manera. Por lo que las convierten en fuentes ricas en minerales naturales y productos más saludables en general.
Claro que con esto no queremos decirte que puedes entonces consumir grandes cantidades de sales naturales, ya que de igual manera siguen teniendo un alto contenido de sodio. Pero debido a no ser tan procesada como la sal de mesa, la convierte en mejores opciones. Entre las sales naturales las más utilizadas son la sal marina y la sal del Himalaya o sal rosa.
Sal marina
La sal marina por lo general proviene de climas cálidos con altas tasas de evaporación y poca lluvia. Esta sal se hace al inundar piscinas artificiales con agua salada del océano y esperar a que el agua se evapore bajo el sol. Lo cual deja varios tamaños de cristales de sal marina. Estas áreas de producción de sal se conocen como salinas.
El agua salada tiene más o menos un 2,6 por ciento de sal en peso. Pero los diferentes tipos de sal se recolectan de manera distintas y tardan diferentes períodos de tiempo en evaporarse. Entre los tipos de sales marinas, las cuales algunas están un poco más procesadas que otras, por lo que es preferible elegir las menos procesadas.
Algunas de las variedades de sal marina incluyen la hawaiana, australiana, en copos, flor de sal francesa, la cual es popular. Esta se elabora a partir de los cristales de sal ligera que se desprenden de la superficie del agua en las piscinas de evaporación.
Piscinas de evaporación para la extracción de la sal marina
Este método de desnatado hace un tiempo atrás, era considerado solo trabajo de mujeres. Esto debido a que se creía que se necesitaba de un toque delicado para extraer la sal adecuadamente. También está la sal marina gris o celta. Puede que no hayas escuchado mucho hablar sobre la sal marina gris.
Esta se cosecha de lechos de sal con arcilla, de allí su color gris característico. Contiene un mayor contenido de humedad y más de 100 minerales diferentes. Posee menos sodio que la mayoría de las otras sales e incluso, puede que sea la sal más rica en minerales disponible en la actualidad.
La sal marina sin refinar contiene hasta 60 diferentes minerales traza. Algunos de estos son el potasio, el bromo, el boro, el hierro. También el zinc, el magnesio, el cobre, el silicio y el calcio. A diferencia de la sal refinada normal o la sal de mesa, la sal marina suele ser gruesa, ya que está menos molida.
Si lo espolvoreas sobre los alimentos después de cocinarlos, es posible que tengas una sensación en la boca un poco diferente que cuando utilizas la sal de mesa. Sin embargo la sal marina en tus alimentos puede que te provoque una explosión de sabor.
Otros tipos de sal marina
Sal rosada del Himalaya
La sal rosada del Himalaya es la forma más pura de sal en el mundo. Esta sal no se extrae del mar sino de las minas pero la hemos incluido en esta lista por su popularidad y similitud con la sal marina. Esta se cosecha en la región de Punjab en Pakistán, principalmente en la mina de sal de Khewra.
Su color varía de blanquecino a rosa intenso. Y posee los 84 minerales y elementos naturales que se encuentran en nuestro cuerpo. La sal del Himalaya, actualmente se utiliza en tratamientos de spa, así como también en la cocina, tanto para salar como para decorar.
Debido a su contenido de minerales relativamente alto, su sabor es más suave y no tan fuerte como la sal de mesa. Las losas de sal rosa del Himalaya se pueden usar tanto para cocinar como para servir ya que puede retener la temperatura por un tiempo prolongado.
Cabe mencionar que, las piezas sin terminar, por lo general, son utilizadas para convertirlas en lámparas de diferentes formas y tamaños. Los oligoelementos que se encuentran tanto en las sales de mar como en la sal del Himalaya son minerales que nuestro cuerpo necesita para preservar el pH corporal saludable.
También para prevenir la deshidratación, equilibrar los electrolitos. Así como apoyar la función cerebral, muscular y nerviosa, y ayudar en la digestión y desintoxicación. Estos minerales también ayudan a fortalecer los huesos, prevenir los calambres musculares. Mejorar la circulación e incluso mantener una presión arterial saludable.
También se cree que incluso pueden mejorar la salud de los riñones y la vesícula. Pero debemos de tener en cuenta que hace falta un poco más de investigación al respecto. Aunque de igual manera, estas son sales menos procesadas, por lo que son un poco más saludables en general.
La flor de sal
La flor de sal es una sal marina recolectada a mano de charcos de marea, frente a la costa de Bretaña, Francia. Estos son cristales de sal tan delgados como el papel. El proceso consiste en rasparse de manera como si se estuviera desnatando suavemente de la superficie del agua, utilizando rastrillos de madera.
Este proceso solo se puede hacer durante los días cálidos y soleados con brisa ligera y con poca humedad. Cabe mencionar que, debido a su escasez y al proceso de extracción y mano de obra, la flor de sal es una de las sales más caras, por lo que se le ha colocado el sobrenombre de “el caviar de las sales”. La flor de sal retiene la humedad y posee un color gris azulado gracias a su alto contenido de minerales.
Sal marina gris o celta
La sal del mar celta se recolecta del fondo de los estanques de marea en los estuarios cerca de la ciudad de Guérande en Francia. Los cristales de sal se rastrillan luego de hundirse y poseen un contenido de humedad relativamente alto. También posee un alto contenido de minerales que incluye trazas de azufre, magnesio, potasio, bicarbonato.
También bromuro, borato, estroncio, fluoruro, calcio, hierro, manganeso y zinc. Esto le da a la sal gris o celta sus granos húmedos y gruesos, su tono gris y su sabor salado. Esta sal es perfecta para la carne y el pescado. También para utilizarse para salar como para decorar las comidas al igual que para hornear.
Sal negra de Hawái
Esta sal también es conocida como sal de lava negra. La sal negra de Hawái es proveniente de las islas volcánicas de Hawái. Y es una mezcla de sal marina y carbón volcánico purificado o carbón activado como también es conocido. La sal se evapora en piscinas elevadas, las cuales se formaron naturalmente a partir del flujo de lava de los volcanes. Obviamente se caracteriza por su llamativo color negro y su sabor ahumado. Y esto a su vez la convierte en una estupenda opción para decorar cualquier plato bien sea de carnes, mariscos o ensaladas.
Sal roja de Hawái
Esta también se conoce con el nombre de sal de alaea. La sal roja de Hawái es una sal marina sin refinar. La cual le debe su color rojo ladrillo a una arcilla volcánica hawaiana llamada alaea. Esta se compone con más de 80 minerales y es rica en óxido de hierro.
La sal roja de Hawái ha sido usada por los hawaianos durante siglos para limpiar, purificar y bendecir herramientas, canoas, hogares y templos. Pero de igual manera, también se usa para preparar platos tradicionales como kalua pig, poke y pipikaula.
Sal de lava negra de Chipre
También conocida como sal mediterránea en escamas. La sal de lava negra de Chipre es parecida a la sal negra de Hawái en su extracción. Esta tambien se procesa a partir de carbón volcánico negro. Con la excepción que proviene de la isla de Chipre en el mar Mediterráneo.
Unida con carbón activado, los cristales son de gran tamaño, de color negro azabache con cierta forma de pirámide. La sal de lava negra de Chipre también actúa como un desintoxicante con un sutil sabor terroso. De igual manera la puedes utilizar para decorar o salar tus comidas, tanto carnes como pescados y ensaladas.