Bolsos de trapillo – creando modelos personalizados y elegantes
Se ha convertido en un material muy buscado para disímiles creaciones. Con el tenemos la posibilidad de estar a la moda y lucir algo personalizado. Hablamos del trapillo un complemento obligado de los bolsos de trapillo. Para los que no lo conocen se trata básicamente de hilos de mayor grosor. Son el resultado de los restos de la elaboración de camisetas. Comúnmente en lycra así como también en el caso del algodón.
Bolsos de trapillo elegantes
La manera en la que están cortados permiten que se puedan hacer los bolsos de trapillo. Así como mantas e incluso collares, simplemente es cuestión de imaginación. Para los que comienzan a trabajar con este material hay que decir que es algo reciclado. Resulta muchas veces muy difícil encontrar el mismo ovillo. Siempre hay diferencias de textura también en lo relacionado al color.
No existe tampoco un catálogo que permita hacer una gran diferenciación. Para los bolsos de trapillo comenzamos con el de algodón. Se trata tal vez del más común, pero a veces no solo tiene algodón en su composición. Por lo general un ovillo tiene hasta cien metros lo que lo hace muy pesado. Lo más interesante es que la variedad de colores es muy amplia.
Lo que aumentará el atractivo de los bolsos de trapillo. Otro detalle a tener en cuenta para crear bolsos de trapillo es el grosor. Realmente no solo para los bolsos. Cuando se compra es necesario pensar en el proyecto para el cual lo necesitamos. Algunos que sean demasiado gruesos los puede aprovechar por ejemplo para cestos.
Bolsos de trapillo con flecos
Para los bolsos los de menor grosor aseguran que sean más ligeros. Si son más suaves un bolso con algunos flecos lucirá genial. Hay otros discos de tela mucho más ligera que iguala en metros a los de siempre pero con un peso menor. Sobre todo se trata de gasa o acrílico en ovillos con un formato diferente. Toda la tira no presenta variaciones en cuanto al grosor.
Por lo tanto los bolsos de trapillo tendrán una mayor uniformidad. Otro de los perfectos para bolsos son los trapillos de lycra. Hay una variedad de colores considerable y muy llamativos. Para otras soluciones decorativas no se les puede sacar el máximo. Como variante de los bolsos las billeteras o carteras lucen de igual modo especiales.
Lo que los hace sumamente atractivos es la posibilidad de agregar detalles a nuestro gusto. Realmente con un rollo de trapillo las posibilidades son ilimitadas. Desde los bolsos con una imagen más tradicional hasta experimentar un poco formando trenzas. Para la confección de bolsos de trapillo las trenzas puede coserse juntas. Poco a poco el bolso irá tomando la forma que deseamos.
Simplemente es una manera sencilla de hacer un bolso moderno. Como mencionamos al inicio totalmente personalizado y con detalles frescos. Los diseños originales pueden incorporar algún tejido de ganchillo. Las formas circulares por ejemplo con crochet se pueden plegar. Cosiéndolas pueden funcionar a manera de cierre para tu bolso. Si buscamos mayor originalidad con las tiras plegadas y cosidas en los puntos de bordado se puede lograr.
La mayor originalidad se logra tejiendo a dos agujas con bolsos realmente bellos. Requiere de mayor experiencia en este arte. Así como de un tejido o un esquema que nos sirva de ayuda. Un bolso se trapillo requiere de un rollo de tela. El tamaño debemos considerarlo en relación al bolso que se quiera lograr. Una idea clara en cuanto a las dimensiones las podemos sacar tomando en cuenta lo siguiente.
Los rollos de un metro sirven para tejer una pieza de aproximadamente cincuenta por cincuenta centímetros. Las condiciones de rollo con el que se trabaje tendrán más posibilidades. La tiras se pueden incluso cortar a la mitad. El ancho oscila desde los 0,5 cm hasta los cuatro centímetros de ancho. Si se tiene un rollo de trapillo ya podemos comenzar con nuestro bolso.
Como en cada proyecto para los bolsos de trapillo no podemos pasar por alto las agujas. Comenzando por una normal dedicada a coser y otra de crochet. Las soluciones están pensadas tomando en cuenta el grosor del trapillo. Cuando se trata entre diez y doce es un buen tamaño. Existen patrones que podemos llamar clásicos para los bolsos de trapillo. En su mayoría hechos con ganchillo y algún tirador de tela trenzada. De lo contrario un asa que utilizaremos en el bolso y que puede ser forrado con las tiras de las telas.
Si tienes inutilizadas algunas asas es un buen momento. Pueden traerse a la vida y hacer de cualquier bolso algo muy especial. Resulta una buena idea experimentar con un bolso que combine tanto la tela como el trapillo. Cuando se trata de materiales mixtos es indudable el efecto encantador de las piezas. Simplemente nos quedará añadir otros detalles que los hagan diferentes. Las bolas con tejidos al crochet son un buen ejemplo.
Hay muchas ideas como vemos en las fotos así que solo hay que sacar partido a la imaginación. Es más bien una cuestión de creatividad para que el resultado sea atractivo. Otros patrones muy interesantes salen de la combinación con tiras cosidas. No dudes en aprovechar hasta el más mínimo elemento. Muchas veces hay cosas que no necesitamos y que tenemos en casa. Asas, flores pequeñas, joyería y mucho más.
Todo esto puede añadirse y cambiar la imagen de los bolsos de trapillo. Por tendencia los bolsos tiene una imagen cuadrada. Esto no significa sin embargo que el diseño no pueda variarse. Muestras en forma redonda o de otro estilo son igual de interesantes. Serán ideales para cualquier look. Especialmente si eres amante de las formas geométricas.
Las formas diferentes requieren de pasos muy similares. La mayor diferencia en la práctica está en el acabado. Una caso práctico son los flecos. Diseñados con varios trapillos del mismo largo aunque pueden ser diferentes. Cada uno se va anudando en los huecos de los puntos de la parte baja. Siempre creando dos filas distintas. Si son diferentes el resultado es perfecto para un look desenfadado.